Alan Sosa es producto genuino de las inferiores de Gimnasia. Tras destacarse en Reserva, el extremo zurdo debutó como una de las apuestas del club para renovar el frente ofensivo, pero con el correr del tiempo su figura se fue desdibujando, nunca llegó a explotar uy está a nada de volver a salir del club que lo formó.
En su primer ciclo en el plantel profesional, Sosa alternó titularidades y apariciones desde el banco. En total, disputó alrededor de 30 partidos oficiales con la camiseta de Gimnasia, convirtió un gol y aportó una asistencia, números que reflejan un proceso de adaptación marcado por la irregularidad y la falta de continuidad.
Ante ese escenario, en 2024 salió a préstamo a Aldosivi, decisión que resultó clave para su carrera. En Mar del Plata encontró minutos, confianza y un rol protagónico: jugó más de 30 partidos, fue importante en el funcionamiento del equipo y terminó siendo campeón de la Primera Nacional, logrando el ascenso a la Liga Profesional.

Una vuelta que no funcionó
Ese rendimiento impulsó su regreso a para la temporada 2025, con expectativas renovadas. Sin embargo, la vuelta fue compleja. Tras arrancar con participación en el equipo, Sosa fue perdiendo terreno con el correr de los partidos y terminó relegado en la consideración del cuerpo técnico, quedando fuera del proyecto deportivo de cara a 2026.
Hoy, con contrato vigente hasta diciembre de 2027, en Gimnasia están dispuestos a escuchar ofertas y Aldosivi aparece como el principal candidato para sumarlo nuevamente, con el valor agregado de ser un club que ya conoce y donde se siente cómodo. Los buscó Andrés Yllana para llevarlo a San Martín de Tucumán, pero el reencuentro con el DT con el que fue campeón deberá esperar.
Así, el paso de Alan Sosa por el Lobo —marcado por la ilusión, la búsqueda de consolidación y un cierre sin continuidad— parece empujarlo otra vez hacia Mar del Plata, donde supo mostrar su mejor versión y donde intentará volver a sentirse protagonista.

