Los cultivos de verano bonaerenses entraron en la recta final y pese a la incertidumbre generada por los excesos hídricos, se espera una muy buena cosecha de soja, maíz y girasol. Según informó el ministerio de Agroindustria de Buenos Aires, la superficie sembrada de estos cultivos registró un incremento de 2,4% en relación al ciclo anterior.
De esta manera, el área implantada asciende a 9,03 millones de hectáreas, con una producción que alcanzaría los 33,4 millones de toneladas. La superficie sembrada de soja creció un 1,9%, con un total de 5,6 millones de hectáreas y pese a algunos excesos hídricos puntuales al norte y noreste provincial, el 92% del cultivo se encuentra en condiciones de buenas a óptima, con lo cual espera una producción de 17,5 millones de toneladas.
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Por su parte, la superficie sembrada de maíz creció un 3,4%, alcanzando las 2,54 millones de hectáreas, el máximo nivel histórico para la provincia de Buenos Aires. A su vez se destacan las muy buenas condiciones en que se encuentra el cultivo, con una expectativa de rinde por encima de los últimos años, lo cual permitiría superar una producción de 14 millones de toneladas.
Finalmente, el cultivo de girasol que se empieza a cosechar en los próximos días, también presenta una buena performance, con una superficie sembrada de 844.700 hectáreas y una condición muy buena del cultivo, se espera alcanzar una producción de 1,85 millones de toneladas. De cumplirse estas proyecciones, se espera que los ingresos de la campaña 2018/19 al circuito productivo alcancen los 7 mil millones de dólares.
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