Este jueves, el nuevo programa “The Floor” conducido por Guido Kaczka, presentó un momento tan inesperado como llamativo cuando una participante llamada María se convirtió en el centro de atención por una particularidad única: su risa nerviosa.
El novedoso ciclo de entretenimientos de El Trece, que comenzó el lunes, se basa en la competencia entre sesenta y cuatro jugadores que se enfrentan en duelos para conquistar las casillas de sus oponentes. En esta ocasión, el tema del desafío eran los superhéroes, y fue durante este segmento donde María se destacó de una manera completamente inesperada.
La participante del nuevo programa de Guido Kaczka y su risa nerviosa que fue viral
UNA RISA INIGUALABLE
El desafío era simple: descubrir quienes ersn los superhéroes que aparecían en el “videowall”, en un duelo mano a mano con otro participante.
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Sin embargo, lo que hizo que este segmento se destacara no fueron las respuestas acertadas o incorrectas de María ni de su rival, sino la forma en que reaccionaba a cada pregunta. Con cada respuesta que daba, ya sea acertada o no, María soltaba una risa nerviosa que rápidamente se volvió sorprendente, contagiosa y memorable para los televidentes y los presentes en el estudio.
La risa de María no era una risa cualquiera; era una risa finita, aguda, y en cierto modo, tan peculiar que resultaba casi imposible no empatizar con ella. Como la de Eddie Murphy en algunas películas, o “La Niñera” en su versión estadounidense.
A medida que avanzaba el desafío, su risa nerviosa surgía de manera cada vez más frecuente, especialmente cuando cometía algún error.
Este rasgo, que podría haber sido motivo de burla en otras circunstancias, se convirtió en el factor que hizo que todos, desde los televidentes hasta el propio Guido Kaczka, se encariñaran instantáneamente con ella.
María, a pesar de su evidente nerviosismo, enfrentó el desafío con una actitud positiva y una alegría desbordante. Sin embargo, no logró ganar el duelo, lo que significaba que debía abandonar el juego.
En un gesto que demostró el carácter amable y empático de Guido Kaczka, el conductor se acercó a María y la abrazó, reconociendo la singularidad de su risa y el impacto que había tenido en el programa. “María, María, te quiero”, le dijo Guido mientras la despedía. “Perdiste este duelo, pero sos muy espectacular, muy espectacular”.
GUIDO KACZKA, UN DISTINTO
Este fue un momento particularmente destacado porque en un contexto de televisión, donde por lo general se hace humor a costa de las características o peculiaridades de los participantes, Guido Kaczka optó por un enfoque totalmente diferente.
En lugar de hacer un chiste o comentario que pudiera interpretarse como burla, el conductor eligió destacar la autenticidad de María y la forma en que su risa nerviosa había conquistado a todos en el estudio.
