En un ambiguo editorial con tono ofuscado, el conductor de América TV, Baby Etchecopar, fustigó a sus compañeros “detrás de cámara” por haberle cerrado el volumen de los micrófonos (los “pote”, de potenciómetros), haciéndolo salir al aire sin sonido el día del retorno al aire de su ciclo “Basta Baby”.
El hecho que se dio el lunes en el canal de Vila, Manzano y Bellocopit, se suma a una larga lista de consecuencias producidas por el deterioro económico de los diferentes programas, señales de cable, y canales de aire de la televisión argentina, producto del recorte en las pautas publicitarias que por convicción, o por la crisis, vienen promoviendo los diferentes gobiernos en todos sus estamentos, y otros organismos oficiales.
Santiago del Moro en Gran Hermano, por ejemplo, se solidarizó con la medida de fuerza de los trabajadores.
Un notero de Crónica fue echado por exponer al aire su precaria condición de contratación.
El extenso descargo de Baby Etchecopar ante el conflicto del gremio de televisión
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¿CONFLICTO SIN COMPAÑERISMO?
Ahora Baby Etchecopar salió a defenderlos, pero al mismo tiempo a endilgarles la “falta de compañerismo” por haberle generado un muy bajo rating el mismo día de su rentreé en este 2024, con el “affaire” de los micrófonos apagados.
“Recién vino uno y me dijo te hicieron paro los muchachos por lo que dijiste el otro día”, comenzó su duro comentario el conductor de América TV.
“Lo único que tengo de bueno es el compañerismo. Cuando hubo que repartir, hubo para todos. Cuando uno vino con un problema, le dije anda a ver a tal tipo. Siempre estuve”, se defendió Etchecopar para no quedar “pegado a la patronal”, aunque tampoco al gremio.
“Estaba cortado el micrófono. Eso sí es falta de compañerismo, bajar todos los ‘potes’ cuando voy a salir al aire, cuando yo no les hice nada”, se defendió de lo que consideró un ataque personal y no parte de un conflicto gremial.
Lo real es que a pesar del esfuerzo que realizan desde las gerencias de las diferentes señales televisivas para que no se vuelva tendencia el reclamo de los trabajadores, de una u otra forma termina viéndose en las pantallas los coletazos del conflicto, ya sea por solidaridad de las estrellas o por el enojo de los asalariados menos favorecidos que muestran sus rostros en los envíos.
