Mientras las universidades públicas se agrupan para reclamar por la aprobación de la Ley de Financiamiento Universitario, que fue dilatada por el Senado de la Nación, Javier Milei se deshace en loas hacia el dueño de Mercado Libre, Marcos Galperín, a quien le otorga más de 100 millones de dólares por año en subsidios impositivos.
La motosierra con la que el Presidente amenaza a jubilados, universitarios y estatales se guarda cuando enfrente hay un empresario. Como señaló el periodista Alejandro Bercovich en un reciente artículo de El Diario Ar, las subvenciones de Mercado Libre superan el presupuesto de gastos de funcionamiento en todas las universidades púbicas del país. Paradójicamente, allí se formó casi el 60 por ciento de los empleados que la empresa tiene en la Argentina.
Según datos oficiales, durante el primer cuatrimestre de 2024, el Gobierno Nacional ejecutó partidas por 31.134 millones de pesos en concepto de gastos de funcionamiento. A tipo de cambio oficial son “apenas” 32.5 millones de dólares. No es el único número rojo: al comparar las cifras interanuales se observa una caída real del 52,4 por ciento.
Discurso libertario pero negocios con “comunistas”: El método Marcos Galperin
Tras anunciar una inversión de 75 millones de dólares para abrir un nuevo centro de distribución de su empresa, Galperín se deshizo en elogios a la gestión libertaria: “Ahora estamos muy contentos de abrir nuevamente un centro de distribución en Argentina porque creemos que la inflación está bajando, muchas de las malas decisiones económicas han sido corregidas y se han tomado muchas buenas decisiones“, sostuvo.
Lo que omitió el empresario radicado en Uruguay por motivos fiscales es que el Estado es una pieza clave en el desarrollo de su nuevo depósito. Eduardo Bastitta, dueño de la firma Plaza Logística y parte de los asesores de Javier Milei, pagaba en 2020 una tasa de apenas $2,70 el metro cuadrado por mes al Mercado Central por la concesión de las tierras. Sin ese impuesto subsidiado, no habría desarrollo posible. Pese a ser “enemigo del Estado”, Galperín se beneficia de él cada vez que puede.
Tampoco parece irle mal con los gobiernos “comunistas”. Pese a su favoritismo discursivo hacia Javier Milei, el anuncio de inversiones de Mercado Libre para Brasil, donde gobierna Lula Da Silva, fue de 4.000 millones de dólares. En México, otro gobierno “socialista” según el discurso libertario, la empresa de Galperín anunció inversiones por 2.400 millones de dólares. Desde esa perspectiva, los 75 millones que volcará en la Argentina parecen apenas un vuelto.
