El Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (ISEPCI) emitió un comunicado bajo el título “Los alimentos aumentaron más de un 100% en el último año y en octubre subieron 7,74%”, con el resultado del relevamiento mensual de precios de los 57 productos de la Canasta Básica de Alimentos (CBA) en 900 comercios de cercanía en los barrios populares del GBA y el análisis de coyuntura.
Según el informe, en octubre del año anterior la misma CBA valía $29.515,34, pero doce meses más tarde, para realizar la misma compra, había que desembolsar $59.443,63. Es decir que la suba porcentual fue de más del doble: 101,40%.
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Los números de octubre indican que el aumento de los precios fue del 7,74%. Así, una familia de dos personas adultas y dos hijos pequeños, que en septiembre necesitaba $55.172,38 para adquirir sus alimentos indispensables, un mes más tarde requería $59.443,67, o sea que necesitó agregar $4.271 más a su presupuesto para adquirir los mismos productos y evitar caer por debajo de la línea de indigencia.
Si desagregamos los incrementos por rubro, las frutas y verduras siguen encabezando todos los ránkings. Solo en octubre, subieron un 19,72%, mientras que aumentaron 158% desde octubre 2021. Por su parte, las carnes se incrementaron 1,21% el mes pasado y acumulan un 72,89% en relación a 365 días atrás.
En lo que va de 2022, el valor de la CBA subió 86,64%, y a falta de dos meses para que termine el año, la inflación rozaría los tres dígitos, un número muy lejano al que se barajó en el Presupuesto 2023, que estipula, para el año que viene, un 62% de inflación.
Los incrementos de estos precios, remarca el informe del ISEPCI, vienen incidiendo desde hace tiempo en la pérdida de poder adquisitivo de las remuneraciones en general, y en particular sobre las asignaciones sociales, jubilaciones y remuneraciones mínimas. Un rápido recuento comparativo con el valor de la CBA (medida por el INDEC) desde el inicio de 2020, hasta septiembre pasado, muestra algunos datos significativos.
Si tomamos como fecha de partida enero del 2020, a días de la asunción del Presidente Alberto Fernández, el Potenciar Trabajo cubría el 51% del total de la Canasta de Alimentos; ya en septiembre pasado, llegaba al 48%. En el primer mes de gestión del Frente de Todos, con la Tarjeta Alimentar se podía adquirir hasta el 36% de los alimentos básicos, mientras que en septiembre solo alcanzaba para el 23% de ellos; por último, con la Asignación Universal por Hijo (AUH) para dos hijos, en enero del 2020, una familia compraba hasta el 26,7% de su comida, y en septiembre del 2022, solo logra cubrir el 23,9% de los mismos productos.
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