“Yo diría que el objetivo es tener una ley en 2012 y el principio de la selección de los primeros especialistas. Sería magnifico empezar a funcionar en 2013. Esto es tan importante que no nos podemos apresurar. Tiene que haber formación científica y un presupuesto adecuado”, consideró Falbo.
“No podemos ni debemos copiar sistemas de Suecia u Holanda que no servirán en la provincia de Buenos Aires. Por lo tanto, el proyecto final debe ser discutido en profundidad, en las universidades, en los ámbitos políticos y en la sociedad. Tampoco hablo de un debate de diez años”, amplió la procuradora en declaraciones a un matutino porteño.
Al ser consultada sobre qué características tendrá esta nueva fuerza, Falbo explicó que estará integrada por “un grupo de especialistas que actúan después de que el delito se cometió, investigando”. En ese marco, aclaró que, “por supuesto, no portarán armas” porque “la base será la alta tecnología, la genética, el análisis de comunicaciones y las ciencias forenses.”
“Toda la idea es crear una policía judicial, no militarizada, es decir con integrantes que no tendrán uniforme ni aprenderán a marchar ni a hacer cuerpo a tierra. Tendrán que cargar con todo el peso de las investigaciones, siempre a las órdenes del fiscal”, cerro Falbo en diálogo con Página 12.