Gimnasia vive momentos deportivos complicados. Aún inmiscuido en la pelea por mantener la categoría y con la salida de Alejandro Orfila consumada, Fernando Zaniratto, el técnico de la Reserva, se hizo cargo del plantel principal de cara al Clásico Platense y en redes sociales recibió el apoyo de su familia.
Zaniratto asumió de manera interina por segunda vez en el año. Anteriormente dirigió tres partidos tras la salida de Marcelo Méndez, obteniendo buenos resultados y en esta ocasión, buscará repetir lo conseguido en el primer semestre y de esa manera cumplir el objetivo de mantener al Lobo en Primera División.
Con este panorama y sabiendo el desafío que le espera a su padre, Matteo Zaniratto, hijo de Fernando, bancó al nuevo técnico tripero y también le dejó un mensaje a los hinchas del Lobo: “Qué semana eterna. Qué ansiedad, qué nervios. Quédense tranquilos que va a dar la vida por hacer lo mejor posible, no tengo dudas. Te amo, pa”.
El mensaje del hijo de Zaniratto, rápidamente se viralizó entre los hinchas del Lobo en redes sociales, que también buscaron hacer llegar su apoyo al nuevo técnico a través del emocionante posteo de su hijo.
El desafío de Zaniratto
El técnico que se venía desempeñando de buena manera en la Reserva y que a falta de tres fechas de que termine la primera instancia del Clausura de la divisional, ya clasificó al equipo a los play off, buscará levantar al plantel principal tripero, que actualmente es el equipo que más derrotas cosecha en en el campeonato.
Quién reemplaza a Zaniratto
Gimnasia oficializó que el nuevo técnico de la Reserva será Ricardo Kuzemka, el DT de la Cuarta División se hará cargo del plantel del selectivo en lo que queda del Torneo Clausura y será acompañado por Lucas Lobos y Luciano Parini como ayudantes de campo y Diego Gómez como preparador físico.
El cierre de Villalba a lo Mascherano para meter a Argentina en la final del mundial Sub 20
La Selección le ganó 1 a 0 a Colombia por el gol de Prestianni y se metió en la final tras 18 años. El pibe de Gimnasia metió un cierre clave, igual al de Masche contra Robben en Brasil 2014.
