“Necesitamos hacer un partido perfecto y ya hemos hecho partidos perfectos”, la frase que lanzó el entrenador de River, Marcelo Gallardo, en las horas previas a la revancha de la semifinal de la Copa Libertadores que lo tiene como punto tras el contundente 0-3 que consiguió Palmeiras en condición de visitante.
Los brasileños parecieran tener un pie y medio en la final, luego de haber soportado los embates del millonario por 30 minutos y luego transformar en gol sus posibilidades en Avellaneda, donde el millonario actua de local mientras remodela su histórico Estadio Monumental de Nuñez
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River llega a Brasil en busca de una jornada épica víctima de errores puntuales que le valieron un partido clave y también padeciendo la salida de un referente en el fondo como lo fue Lucas Martínez Quarta que dejó el club en octubre del 2020 por una cifra récord (15 millones y medio de euros) pero también en plena competencia.
Es por eso que ante esta situación, River tendrá en Sao Paulo quizás la más difícil de sus batallas de los últimos años: dar vuelta al 3-0 ante Palmeiras que, además, ostenta un temible invicto de local: “Tendremos que tener una noche épica, que existen en el fútbol, que se dan de vez en cuando, pero existen. Nos agarraremos de eso”, dijo Gallardo al término del encuentro del pasado martes.
¿Qué necesita River para pasar a la final?
Para que esta sea una noche soñada para los de Gallardo y una de pesadilla para el verdao hay que aplicar matemática simple: El Millo deberá ganar por una diferencia de cuatro goles para lograr el pasaje al Maracaná (4-0; 5-1; etc.). En caso de imponerse por el mismo resultado (3- 0) la historia irá a penales, pero ¿qué pasa si Palmeiras anota un gol? River seguirá estando obligado a anotar cuatro tantos para pasar directamente. Si el global queda 4-4, River clasificaría porque habría anotado más goles de visitante.
