El Bosque fue testigo de un emotivo momento cuando se terminaba el primer tiempo y Nicolás Ortiz en su debut en primera de la mano de su papá, ponía el 1 a 0 marcando su primer gol en primera que su hermano Hernán festejó desde la tribuna.
Mucho se habló en la previa acerca de la relación entre padre e hijo le permitió jugar, algo que quedó desterrado con su actuación. Teniendo en cuenta esto, el central aseguró: “Quería demostrar, se hablan muchas boludeces, quería hacerlo adentro de la cancha. Son decisiones, yo traté de hacer mi trabajo y gracias a Dios se dio un debut soñado”.
Pensando en su conquista y la comparación con su viejo que nunca pudo hacer un gol, remarcó: “Prefiero tener la cantidad de partidos de mi viejo y no el gol, estoy muy contento. Trate de nunca bajar los brazos, veía que debutaban compañeros más chicos y te bajonea, pero seguí trabajando para tener la chance”.
La sorpresiva visita de un viejo conocido a Estancia Chica
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Pensando en el Indio, su hijo se mostró agradecido por el reconocimiento de los hinchas una vez que terminó el partido: “En un momento me colgué por la ovación, me enorgullece. Él estuvo jodido, hoy en día que le vaya bien le pone muy contento”.
Por último, dejó en claro que pensando en lo que se viene ya con Troglio en el banco, va a pelear por ganarse un lugar: “Voy a dar todo para que me toque estar en la pretemporada y convencer a Pedro para quedarme, estoy muy feliz acá. En el gol se me vinieron a la cabeza mi familia, mis amigos, en el entretiempo dije que me tengo que concentrar”.
