La juvenil promesa de la natación mundial, nacida en San Isidro y dueña de múltiples medallas habló hoy en TN y repasó su difícil momento profesional al no poder realizar ningún tipo de prácticas vinculada con la natación en piletas profesionales.
“La natación es un deporte que no se puede reemplazar con ejercicios afuera del agua. Todas mis rivales están entrenando y estoy en total desventaja. Yo tengo ganas de ir a los Juegos Olímpicos para representar a mi país y ponerme mi bandera, pero me gustaría hacerlo bien y no ir mal preparada Para eso tengo que entrenarme. No puedo prepararme un mes antes”, señalo la bonaerense.
El entrenador de Pignatiello, Gustavo Roldán, advirtió que el pedido es desesperado: “Hace semanas que presentamos protocolos para volver a entrenar y no tuvimos respuestas. Hace nueve semanas de esto. Llevamos 75 días de aislamiento y no tenemos respuesta del gobierno. El protocolo es excelente y hay cero posibilidades de contagio pero seguimos sin respuesta“.
Estudiantes y el trauma de los diez minutos: desconcentraciones que le cuestan puntos y prestigio
Como ante la U de Chile y Banfield, un puñado de minutos dejó al equipo sin nada. La concentración y los planteos, aspectos claves a mejorar si quiere pelear por cosas importantes.
“Saber que tal vez no pueda prepararme me frustra muchísimo y pienso en no estar tal vez en los Juegos Olímpicos“, dijo la nadadora y agregó “desde que arrancó la cuarentena intenté ser positiva y mantener el sueño olímpico, pero semana a semana le fui diciendo a mi entrenador ´ya no sé qué hacer´. Ya siento que estoy entrenando para sentirme bien pero sin el objetivo de los Juegos Olímpicos”.
La bicampeona mundial juvenil que fue una de las representantes de Argentina en los Juegos Olímpicos de la Juventud de Buenos Aires 2018 y emblema de la delegación nacional quedándose con dos medallas de plata, en 400 metros libres y 800 metros, remarcó que “Hace once semanas que no entro a una pileta, es un récord mundial de no nadar”.
