Casi al mismo tiempo que Nicolás Barros Schelotto se incorporó a Gimnasia para jugar en la Reserva, se dio la vuelta al fútbol argentino de su papá, el Rey Guillermo I para dirigir a Vélez. Pues bien, este martes se dará una situación particular: el equipo de Zaniratto visitará al Fortín a partir de las 15 en la Villa Olímpica y ahí, seguramente, el volante del Lobo afrontará un partido especial.
Al jugar Gimnasia en el lugar donde se entrena la Primera de Vélez, seguramente Guillermo tendrá la chance de estar presente en el partido y seguir de cerca tanto a su hijo como a los jugadores de la Reserva de Vélez que puedan tener alguna chance a futuro en su equipo.
Y si será un caso especial es porque hasta ahora Guillermo no tuvo la chance de ver en vivo a Nicolás desde que llegó a Gimnasia. Por su función como entrenador de Vélez, sólo pudo seguir a su hijo en las transmisiones por TV que se hacen de los partidos de Reserva. Por todo, será un acontecimiento singular. Y familiar, que involucra también al Lobo, desde ya.
Gimnasia, por la recuperación
Nico Barros Schelotto viene siendo titular en la Reserva de Gimnasia, que buscará recuperarse de dos derrotas al hilo, primero en el clásico contra Estudiantes y después contra River, que por el momento lo sacaron de los ocho clasificados a los playoffs (los de Zaniratto marchan novenos en el Grupo B, con 15 puntos).
Igual, la misión no será sencilla, ya que Vélez es justamente el líder de esa zona, con 28 puntos, uno por encima de River.