La vicegobernadora de la provincia de Buenos Aires, Verónica Magario, reconoció públicamente que su candidatura a diputada provincial por la Tercera Sección electoral es testimonial. En declaraciones radiales, aseguró que en caso de obtener una banca no planea asumir, ya que su intención es continuar en el Ejecutivo acompañando al gobernador Axel Kicillof hasta el final del mandato.
“Mi intención no es asumir sino seguir al lado de Axel. Somos parte del equipo de Axel y llevamos seis años trabajando, y vamos a seguir trabajando”, sostuvo Magario en diálogo con Radio Futurock. De esta manera, confirmó que su nombre en la lista no responde a la voluntad de integrar la Legislatura bonaerense, sino a reforzar la estrategia electoral de Fuerza Patria en la previa de los comicios del 7 de septiembre.
La respuesta de la vicegobernadora llegó luego de las críticas del presidente Javier Milei, quien había denunciado que algunas candidaturas del oficialismo bonaerense eran meramente testimoniales. Lejos de desmentir esa acusación, Magario la ratificó: “Mi candidatura es la representación clara de un grupo de hombres y mujeres que gobernamos distinto del Presidente”.
En ese mismo tono, la funcionaria cargó contra la política económica de Milei: “Nosotros no somos lo mismo que Milei, y podemos sacar este país adelante de otra manera. Lo que está haciendo el Presidente en la micro y en la macroeconomía nos está matando”, afirmó. También cuestionó el incremento de la deuda y la suba de tasas de crédito, a las que definió como un golpe directo al consumo de las familias argentinas.
LAS TESTIMONIALES EN LA MIRA
Las declaraciones de Magario no pasaron desapercibidas en la escena política bonaerense. En medio de una campaña corta y con fuerte peso territorial, su admisión abrió nuevamente el debate sobre las candidaturas testimoniales, una práctica recurrente en la política provincial y nacional. En estos casos, dirigentes de peso encabezan listas para traccionar votos, pero luego no asumen los cargos a los que fueron electos, dejando sus bancas a suplentes. Con la confirmación de Magario, la polémica se reaviva.