En su reencuentro tras tres meses de cruces en el Frente de Todos, la vicepresidenta Cristina Kirchner aseguró que “gobernar es administrar tensiones en favor de las grandes mayorías”, y le pidió al presidente Alberto Fernández que “use la lapicera”.
En un acto por el centenario de YPF en Tecnópolis, Cristina Kirchner valoró la nacionalización de la petrolera acontecida durante su segundo mandato, sopesó la proyección de la empresa con el yacimiento de Vaca Muerta y le pidió al presidente mayor control sobre los proveedores de insumos para la construcción del gasoducto Néstor Kirchner.
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Luego de las palabras inaugurales del titular de YPF, Pablo González, la vicepresidenta mostró un video en el que el ex ministro de Economía del macrismo, Nicolás Dujovne, aseguraba en 2015 que el país, las empresas y las familias estaban desendeudadas. Entonces, hizo un repaso de la política salarial del kirchnerismo, y recordó el 26,9% de inflación que dejó al final de su mandato.
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En un acto con incidentes en la previa, Milei pronunció la frase que reaviva las denuncias por coimas en ANDIS y sorprende a militantes y opositores.
“Puedo admitir que cuando hay una remuneración fuerte, tenemos tensiones inflacionarias. Pero creo que gobernar es administrar esas tensiones y hacerlo en favor de las grandes mayorías. El que quiera gobernar Argentina sin tensiones ni conflicto, que se postule en Suiza. Salvo en los cementerios, acá hay conflictos”, disparó.
Luego, relacionó el problema del endeudamiento en moneda extranjera, que provoca que “el mercado te está midiendo todo el tiempo los vencimientos que tenés”, con la nacionalización de YPF; y contó que “Repsol llegó a constituir el 50% de los dólares que se giraban al exterior. Subieron exponencialmente lo que vendían a la gente, pero cayeron las reservas y la inversión”.
“Cuando tomamos la decisión en 2012, no fue una decisión ideológica, fue realista. Recuperar la soberanía hidrocarburífera”, aseguró Cristina Kirchner.
“El futuro se construye en el presente. Tengo una gran esperanza en que Argentina se convierta en una gran productora de energía. Tampoco creamos que mágicamente nos vamos a salvar porque vamos a tener 33 mil millones de dólares de exportaciones de Vaca Muerta. Porque si no cuidamos los dólares, sino cuidamos las importaciones…”, alertó.
En consecuencia, Cristina Kirchner habló sobre el proveedor de caños sin costura para la construcción del gasoducto Néstor Kirchner, y dijo que “tenemos que comenzar a exigir que la chapa laminada que hacen en Brasil la traigan acá”.
“No podemos seguir dándole 200 millones de dólares para que se paguen ustedes mismos. El balance del 2021 le triplicó lo del 2020, y es una industria muy importante, porque son las chapas de la industria automotriz, de la construcción, de los artefactos eléctrico. El valor difunde a toda la cadena”, criticó sobre la empresa de Paolo Rocca.
“Tenemos que ir a esas cosas. Si tenemos la reserva que tenemos en materia de gas, en Mar del Plata, en Santa Cruz, vamos a hacer muchísimos gasoductos. Se puede, hay que sentarse no como amigos. No pedimos ni que regalen o pierdan plata. Hay un deporte nacional por apoderarse de las reservas del Banco Central. Yo te pido Alberto que uses la lapicera”, concluyó.
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