Los hechos de violencia desmedida son moneda corriente a lo largo y a lo ancho de la Provincia de Buenos Aires. En este contexto, hay algunos que se salen de los habituales dandole lugar a sucesos que rozan lo bizarro: esta vez, ocurrió en Berisso donde un peluquero fue atacado a golpes por un cliente, quien no quedó conforme con el corte.
El violento cliente, quien ya se había retirado de la peluquería decidió regresar y golpeó la puerta de manera violenta hasta que el estilista le abrió. Inmediatamente comenzó a insultarlo y golpearlo.
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Los comercios vecinos escucharon los gritos y llamaron a una patrulla que estaba por la zona. Cuando arribaron los efectivos, el cliente estaba golpeando salvajemente al peluquero. El sujeto fue detenido y el peluquero debió ser atendido por las heridas ocasionadas.
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“Esto no es real, es una mezcla para hacer pólvora”, dijo una alumna segundos antes de la explosión que conmocionó a Pergamino. El experimento escolar dejó a varios chicos heridos y una nena internada de urgencia en el Garrahan.
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CON UN ARMA DE JUGUETE Y UNA CALIBRE 22
La Policía de la provincia de Buenos Aires detuvo a un ladrón que se había atrincherado en una casa tras cometer al menos tres robos a mano a armada en la vecina ciudad de Ensenada. Fuentes policiales revelaron que el acusado, de 30 años, se había ocultado en una vivienda a la que había entrado por la fuerza y, al verse rodeado, finalmente decidió entregarse sin oponer mayor resistencia.
La captura se dio durante la tarde del último miércoles, en 110 entre 5 y 7, cuando tras unos llamados al 911 se dio alerta a las fuerzas de seguridad de lo que estaba pasando: el acusado, según indicaron luego las víctimas, se había ocultado en una finca sin ocupantes tras golpear en la cabeza y asaltar a otro, de 66 años.
Cuando los efectivos llegaron, se entrevistaron con la víctima y esta les detalló lo sucedido, previo a ser derivado al Hospital Cestino para que lo atendieran de un profundo corte en el cuero cabelludo. Antes de robarle a esa persona, según se supo luego, el agresor también había atacado a otras dos para robarles los teléfonos celulares.
En ese marco, los oficiales hicieron un perímetro para encerrar al atacante, que no tuvo más remedio que entregarse. En su poder encontraron dos armas de fuego: un revólver calibre 22 y otro de utilería.
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