Tras la salida de Hugo Moyano de la conducción del Club Atlético Independiente, las nuevas autoridades tuvieron su bautismo de fuego en las últimas horas. Anoche, Néstor Grindetti tomó oficialmente las riendas del club en una asamblea de socios que tuvo un clima difícil.
Con la renuncia en abril del presidente electo Fabián Doman tras haber sido elegido en octubre con más del 70 % de los votos, en medio de un clima político que fue corroyendo la interna y que corrió, por ejemplo, a Cristian Ritondo y a Juan Marconi de los primeros planos que luego volvieron a aparecer cuando Santiago Maratea propuso la colecta entre hinchas para sacar al Rojo de la inhibición.
En medio de ese hervidero quien quedó ratificado tras la Asamblea de anoche en la sede del Rojo como presidente fue el actual Intendente de Lanús, Néstor Grindetti que quedará en la silla caliente del rojo hasta 2026.
La noche se vivió en un marco de extrema tensión donde los socios silbaron, insultaron y cantaron contra la dirigencia dentro del recinto y las facciones disidentes terminaron a las corridas una vez terminada la Asamblea en la que la policía debió intervenir para que la situación no pase a mayores.
En lo que respecta a las votaciones sobre la presidencia de Grindetti, 59 representantes votaron de manera afirmativa, mientras que los bloques opositores de Claudio Rudecindo y de Javier Mazza se abstuvieron de dar su voto e hicieron lo mismo a la hora de votar por el presupuesto que solo fue aprobado por el oficialismo.
“La dirigencia anterior enviaba un número de Swift trucho al América diciendo que habían transferido dinero y era mentira. Tuvimos que pedir disculpas. Una vergüenza“, le dijo Daniel Seone, Secretario General de Independiente que es uno de los encargados de llevar adelante el acuerdo con el Grupo Pachuca, clave en la negociación con América para destrabar la inhibición.
Silbidos en la Asamblea que designó a Grindetti presidente de Independiente