El garrochista argentino compartió los puntos más altos de su carrera desde sus comienzos hasta la final en Río 2016, pero también se permitió un momento para hablar de su nuevo desafío en la vida: formar una familia.
Germán Chiaraviglio quiere poder decir presente en Tokio 2021 y de esa manera, jugar su tercer Juego Olímpico. Sin embargo, tanto por detrás como para delante, hay una historia que lo acompaña.
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Teniendo en cuenta esto, el atleta argentino comenzó recordando sus inicios: “En 2003 y en 2006, Sub 18 y Sub 20 son dos Mundiales en categorías inferiores y fueron años espectaculares. El primero en el inicio de mi carrera en un momento bisagra donde pensé que podía dedicarme a este deporte desconocido, por lo menos en Argentina”.
Luego, conforme al paso del tiempo, recordó lo que fue la final en el Mundial de Beijing a lo que le siguieron los Juegos Olímpicos de Brasil: “Llegar a Río con un envión anímico que había sido el 2015 y bien mentalizado fue una experiencia espectacular, sumado a eso que estuvieron presentes mis amigos y familia. Fue soñado estar en la final, ya estando ahí ya había ganado, era disfrutarlo e hice lo que estuvo a mi alcance”.
Por otro lado, se refirió a una llegada que cambiará su vida: “Algo super importante es que voy a ser papá, mi novia quedó embrazada y estamos en este camino. La cuarentena no se si precipita algunas cosas o las potencia, pero fue el momento”.
“Está bueno, dentro de tantas cosas tan negativas estos días tener un motivo tan lindo y positivo como este. Disfrutando esta etapa todo lo que se puede”, completó diciendo el garrochista de 33 años que pasó por nuestro Instagram Live.
