“Carloncho”, el histórico pizzero de La Plata quedó en situación de calle. A un año de haber cerrado las puertas de su pizzería ubicada frente a Plaza Rocha, tuvo que salir a pedir ayuda a la Fundación “Sumando Voluntades”.
“No andaba esa pizzería, me gasté casi 300 mil pesos para que ande, toda la poca fortuna que tenía ahorrada. Me superó. También por la situación del país, que me atacó también a mí”, contó Carloncho en conferencia de prensa.
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“Todo el mundo me pregunta `¿por qué te viniste después de diez años de Nueva York?´. Ahora lo voy a decir. Vine porque quería levantar la ciudad, este humilde hombre que nació de la pobreza y de la minoridad, que se crió en orfanatos, y lo digo bien, quería hacer algo por la ciudad. Creo que lo conseguí”, confesó.
“Antes había dos pizzerías y ahora hay mil, lo conseguí. Antes había mucha hambre y yo combatí esa hambre. Le he dado de comer a los que menos pueden y otros me imitaban. O sea, forjé algo y ahora yo me pregunto, ¿por mi quién hace algo? Ahora soy yo el que pide ayuda, soy yo el que pide y tuve que venir a “Sumando Voluntades” para que me den una ayuda”, contó con visible angustia.
Por último, le pidió fervientemente al Gobierno: “Que me dé algo de lo que yo hice, yo hice más que ellos. Yo no quiero subsidio para mí, cómo no le dan subsidios a “Sumando voluntades” que hace diez años está remando contra el torrente de olas que vienen. ¿Cómo es posible?”.
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