Luego del cruce de llamadas y mensajes ordenado por la Justicia Federal de La Plata entre la exgobernadora de la Provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, y el procurador Julio Conte Grand, se descubrieron una decena de charlas entre el 13 de abril y el 20 de septiembre de 2017 en cuyo tiempo se dio la reunión en el BAPRO para gestar la Gestapo con el objeto de perseguir sindicalistas y donde surgió la detención del por entonces secretario general de la UOCRA, Juan Pablo “Pata” Medina.
Ahora el juez federal de La Plata, Ernesto Kreplak, que lleva adelante la investigación por la causa por el armado de causas a gremialistas durante la gestión anterior, ordenó el entrecruce de llamadas y mensajes de texto entre la ahora diputada nacional por la Ciudad de Buenos Aires, y quienes fueron los ministros imputados en el caso.
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De los 21 teléfonos ordenados de ser intervenidos, también se destacan los del actual procurador bonaerense, Julio Conte Grand, espías de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) y el del juez Luis Armella, quien tuvo en sus manos una de las causas que presuntamente fueron armadas contra el sindicalista de la contrucción. Además, la medida involucra al ministro de Justicia provincial, Gustavo Ferrari.
Como se desprende de la grabación de una reunión realizada el 15 de junio de 2017 en la sede porteña del BAPRO, hallada en la AFI, el juez Kreplak investiga si existió una asociación ilícita entre funcionarios de Vidal, espías y empresarios para armar causas contra gremialistas.
El proceso
Ante lo expuesto sobre las llamadas entre María Eugenia Vidal y Julio Conte Grand, “atento al estado de autos”, el magistrado requirió ayer a la Dirección de Asistencia Judicial en Delitos Complejos y Crimen Organizado del Poder Judicial de la Nación (Dajudeco) “que realice un cruzamiento de llamadas y mensajes de texto, entrantes y salientes” entre las 21 líneas telefónicas.
En esta oportunidad, el juez incluyó en su pedido a una serie de funcionarios judiciales y del Poder Ejecutivo de la Provincia que no habían sido comprometidos hasta el momento, como es el caso del propio procurador Julio Conte Grand, el juez Armella, así como el secretario Pablo Wilk.
El accionar de Kreplak se condice con el pedido de César Albarracín, el abogado del Pata Medina, quien había solicitado que se amplíe la imputación contra Julio Conte Grand, Ferrari e incluso contra el expresidente Mauricio Macri y los ex jefes de la AFI macrista, Gustavo Arribas y Silvia Majdalani, aunque estos últimos no fueron incluidos en la oportunidad.
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