El imputado pasará a disposición de un Tribunal Oral por “malversación de caudales públicos”, como responsable del sonado caso conocido como “Mochila Verde”, ocurrido en noviembre de 2007.
La medida la dispuso el juez Juan Francisco Tapia, rechazando todos los planteos efectuados desde la defensa.
La requisitoria la hizo a mediados de abril pasado la fiscal de Delitos Económicos doctora Lorena Irigoyen, encuadrando la situación del imputado dentro del artículo 260 del Código Penal, que contempla una pena de 2 a 10 años de prisión, e inhabilitación para el ejercicio de la función pública.
La investigación del caso, la inició el fiscal Eduardo Amavet, quien procesó al funcionario como responsable del hecho, el haber tomado dinero del Casino del Mar para cubrir un faltante en el Central. Al ser indagado, Menéndez, bajo la asistencia del abogado particular Ernesto Fortunato de la Plaza, se negó a prestar declaración.
Menéndez fue mencionado en el 2007 en una investigación sobre los negociados que se manejaban detrás del posible desembarco del adictivo juego de poker Texas Holdem en la Provincia.
Pero este ex funcionario, saltó a la fama por otro escándalo. El denominado caso “Mochila verde”. En el que según registraron cámaras de seguridad se transportaban desde el Casino del Mar del Hermitage al Casino Central de Mar del Plata, 600 mil pesos en una mochila verde, sin camiones blindados ni ninguna de las medidas de seguridad de rigor.
Respecto de su rol de contralor en Ceamse, cabe aclar que según consta en la ‘Reseña de Legislación Ceamse’ publicada por la Secretaría Parlamentaria del Honorable Cámara de Diputados de la Nación: la Ordenanza 37.909 afirma que “se ratifica el Convenio suscripto por el Gobernador de la Provincia de Buenos Aires y el Intendente de la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires por el cual se institucionaliza el Régimen de Fiscalización adicional de los actos que realice el CEAMSE”.
Luego, la Ordenanza 33.691, en el Título VII denominado ‘Fiscalización’, Artículo 21 “la fiscalización de la Sociedad será ejercida por tres (3) Síndicos Titulares que durarán tres (3) años en sus funciones y que serán elegidos por la Asamblea, la que también elegirá igual número de Síndicos Suplentes. De tales Síndicos dos (2) de los titulares y dos (2) de los Suplentes serán designados a propuesta de cada uno de los socios y de acuerdo a las personas que para tal función los propongan a su vez el Banco de la Ciudad de Buenos Aires y el Banco de la Provincia de Buenos Aires y el Síndico Titular y Suplente restante serán designados de común acuerdo por los socios ”.
“Los Síndicos tendrán las obligaciones, responsabilidades, inhabilidades e incompatibilidades que resultan de la Ley Nº 19.550, de la demás legislación vigente y las que puedan establecerse en el futuro para los Síndicos de las «Sociedades del Estado»!, finaliza.
MANEJABA EL DINERO COMO SI FUESE SUYO
El episodio atribuido a Gustavo Menéndez, como se recordará, tuvo lugar el 8 de noviembre de 2007, durante la gestión de Felipe Solá al frente de la gobernación.
Por aquel entonces un empleado del Casino Central denunció operaciones ilícitas con fondos del Estado, dinero que se sacaba del tesoro del Central para pagar, entre otras cosas, sueldos de empleados en negro, y la producción de una pelea de Kick Boxing a cargo del campeón mundial Jorge “Acero” Cali, llevada a cabo en enero de aquel año, cuyos honorarios salieron del tesoro de Lotería.
Según diferentes testimonios obrantes en la causa, y en los que fundamentó la Fiscalía el requerimiento de elevación de las actuaciones a juicio, el encausado utilizaba la caja chica del Central como “si fuera su propio bolsillo”. El tema es que el 8 de noviembre de 2008, como consecuencia de la referida denuncia, se produjo una auditoría en cuyo arqueo se detectó el faltante de una importante cantidad de dinero.
El trámite lo encabezó Paula De La Calle, secundada por Gicel Basoco y Sandra Clark de la Asesoría Legal de Lotería, comprobando que en la caja, en ese preciso momento, faltaban 600 mil pesos. Como si no hubiese pasado nada –siempre de acuerdo a los dichos que aparecen en el expediente–, Menéndez dijo a las funcionarias que “no había problema, la plata se repone al instante”, y a través de su celular, en un claro abuso de sus atribuciones, requirió “refuerzos” a las autoridades del Casino del Mar, del Paseo Hermitage.