Mussis pensó en irse del Lobo cuando no jugaba, narrando que “con mi entorno hablaba que si no tenía la posibilidad de jugar acá iba a buscar otros horizontes para demostrar que podía jugar en Primera, tenia esperanzas de jugar, gracias a Dios me tocó con esta camiseta y con este cuerpo técnico que me llena de orgullo que me hayan rescatado para darme la oportunidad”.
“Me sacaron de un momento que no estaba muy bien, demostrando en mi categoría. Y con cada técnico que llegaba me tenía que presentar por ser profesional pero no me tenían en cuenta y me volvía a mi categoría”, reconoció el mediocampista.
Según lo que pudo describir, mucho tiene que ver el grupo para que el Tripero esté donde está. Y en cuanto a lo personal destacó la influencia de Chimi Blengio, de quien explicó que “es el que más me habla, me dice que jugamos en primera, que te cambia la vida, es el que me tira para adelante, todos los grandes también, pero el me habla en particular”.
“Todos tiramos para el mismo lado y tenemos la cabeza en el objetivo, lo demás queda en segundo plano, los chicos y los grandes estamos por el mismo camino, el objetivo que tenemos enfrente no se va a desviar nunca porque este grupo tiene hambre de gloria”, sentenció.
Siguiendo con esa cuestión, subrayó que “todos nos acostamos y pensamos en el objetivo, que llegue el pitazo final y festejemos el ascenso, el ambiente que hay en el grupo pasa por eso. Este grupo va a dar todo por cumplir el gran objetivo que es de todo el plantel, los treinta y pico, con cuerpo técnico, médicos, utileros, todos estamos en el mismo barco”.
Y para finalizar, contó un detalle personal que habla de lo que siente hoy: “Tengo tatuada la fecha que debuté y mi primer gol, si ascendemos también me lo voy a tatuar, pero no quiero pensar en eso todavía”.