El muy vertiginoso mundo del fútbol cambia día a día. Resulta moneda corriente observar a los entrenadores pasar de un equipo a otro en cuestión de horas, pero la realidad es que muchas veces la oficialización de esas salidas tarda mucho más tiempo por los acuerdos a los que se deben llegar entre las partes. Y quien vivió esa situación en el Olympique de Marsella fue el argentino Marcelo Bielsa, quien luego de su despido en 2015, recién hoy pudo cerrar su paso por el fútbol de Francia.
El ex Newell´s, Vélez y la Selección Argentina, entre otros, firmó de manera oficial a un acuerdo con el Olympique, al que en su momento le había exigido la importante suma de 3.000.000 de euros en concepto de daños y perjuicios, tras aquella forzada desvinculación en agosto de 2015, según lo que informó hace algunas horas la prensa francesa. Según el periódico La Provence, los abogados de Bielsa demandaron al Marsella acusando al club de haber “orquestado una estrategia injusta y fraudulenta”.
El club galo se defendió pidiendo a la Corte de Justicia que desestimara todas las demandas de “Loco” y el caso debía ser reexaminado en el Conseil des Prud’hommes de Marseille, pero Bielsa y Marsella finalmente encontraron puntos en común, sin dar a conocer, por el momento, los términos del acuerdo.
Bielsa, de 67 años, no trabaja desde que dejó Leeds de la Premier League inglesa el año pasado pese a recibir varias ofertas, entre ellas, la del seleccionado de México y la de un probable regreso al Athletic de Bilbao español, el cual finalmente no se concretó.
Lo cierto es que quien también supo comandar a Chile en su momento, finalmente le pudo poner punto final a uno de los capítulos que aún mantenía en suspenso en su particular relación con el fútbol, ese que lo unía a Marsella a pesar de haber sido despedido hace prácticamente ocho años.
