Con motivo del Día Internacional del Donante de Sangre, el Instituto de Hemoterapia del Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires informó que la cantidad de donantes de sangre en el territorio provincial ascendió casi un 10%.
El año pasado 210 mil personas se acercaron a los centros de donación de sangre de la provincia de Buenos Aires, 16 mil más que en 2008, para ofrecer este elemento vital que, pese a los enormes avances alcanzados por la ciencia, no se ha podido reemplazar aún por ningún sucedáneo artificial. El dato representa casi un 10 por ciento más de donantes.
“Se viene avanzando paso a paso, sin embargo tenemos que seguir trabajando en la promoción de la donación de sangre porque del total de donantes el 23 por ciento lo hace de forma habitual, es decir, no motivados por la necesidad de un familiar o amigo enfermo”, detalló Nora Etchenique, directora del Instituto de Hemoterapia con sede en La Plata.
La especialista aclaró que si bien la Provincia de Buenos Aires se encuentra por encima de la media nacional en cuanto a cantidad de donantes habituales, “la meta es aumentar este perfil de donante porque se trata de personas que se interesan por el tema, se informan y, la mayoría, conoce los requisitos para donar”, aclaró Etchenique.
La diferencia entre donante de reposición y donante habitual es clave para el buen funcionamiento del sistema de hemoterapia. El primero es aquel que sólo se acerca a un centro de donación o a un banco de sangre hospitalario porque un familiar o un ser querido enfermo lo necesita, es decir, repone algo que otra persona usó.
En cambio el donante ‘habitual’ es aquel que se acerca a donar al menos dos veces al año y su motivación es simplemente ayudar, “hacer el bien si mirar a quién”, subrayó la especialista. “El donante habitual es el más seguro, primero porque sabe qué condiciones se necesitan para donar, y segundo porque no está moralmente obligado a dar, sólo lo hace por solidaridad”, señaló Etchenique.
Los especialistas en hemoterapia explican que para donar sangre es necesario ser mayor de edad, pesar más de 50 kilos, no haber padecido ni estar enfermo de hepatitis B, sífilis, mal de Chagas, VIH o brucelosis.
El Día Mundial del Donante se celebra el 14 de junio en referencia a la fecha del nacimiento de Karl Landsteiner, un patólogo austríaco que descubrió los diferentes grupos sanguíneos y de este modo se convirtió en el padre la inmunología, motivo por cual recibió, en 1930, el Premio Nobel de Medicina.