Durante el mediodía de este jueves 11 de julio, el abogado, periodista y crítico de arte Fernando Juan Lima renunció a la presidencia del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata. A través de un comunicado en redes sociales, explicó que su dimisión era por las diferencias con la actual gestión libertaria y sus autoridades.
“No he de seguir presidiendo el Festival Internacional de Cine de Mar del Plata. Me pesa tener que irme así, tan avanzado el año y con tantas cosas en proceso para la próxima edición”, introdujo el ex funcionario.
Recordemos que Fernando Juan Lima había asumido la presidencia en 2020, tras el fallecimiento de su antecesor, José Martínez Suárez. Recordemos que Lima ya formaba parte del equipo del festival.
Sobre ello, Lima recordó: “Hemos intentado hacer lo mejor que pudimos, en circunstancias difíciles (desde febrero de 2020 los tiempos no han sido particularmente luminosos)”.
Los motivos de la renuncia del ex presidente del Festival de Mar del Plata
Según acusa Lima, son varias las diferencias con el secretario de Cultura y del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales, el economista Carlos Pirovano: “El tema es que son muchas (demasiadas) las cosas que no compartimos, las ausencias que se vienen señalando y los avances y actos que consideramos impropios. Frente al planteo de estas circunstancias la decisión política fue la de que no continuase en el cargo”.
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Y agregó: “Nadie es dueño del festival, que es de todos. Espero que se tomen las decisiones necesarias para que el festival mantenga su nivel y calidad artística, que crezca y que se respete su mirada humanista y sus lineamientos de libertad, inclusión y diversidad”.
Los últimos seis meses de ajuste, recorte y cambios
Cabe destacar durante estos seis meses de gestión del gobierno libertario y de su funcionario, Carlos Pirovano, el INCAA sufrió importantes cambios buscando dejar “de ser un agujero negro de recursos”. Eso lo llevó a más de 200 despidos, manifestaciones, artistas nucleados para que “no apaguen el cine nacional” y más.
Entre las últimas consecuencias, se había dado a conocer que el Festival de Internacional de Cine en Mar del Plata cambiaría de formato con la nueva gestión. Consecuencias que rápidamente tuvieron efecto.
