En el afán de conseguir el déficit cero, el gobierno nacional viene reduciendo la cantidad de subsidios que le destina a los servicios públicos. Esto implica que los usuarios reciben tarifas cada vez más caras en materia de luz, gas, agua y transporte. El impacto en el conurbano bonaerense.
El Observatorio de Tarifas y Subsidios del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP) dependiente de la UBA publicó su relevamiento mensual con los datos actualizados a agosto. El reporte indica una familia tipo del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) necesitó 144.433 pesos para pagar los servicios públicos. Esto incluye luz ($38.137), gas ($34.973), agua ($24.486) y transporte ($46.837).
De esta manera, la canasta básica de servicios públicos subió 1,3 por ciento respecto de julio. A su vez, acumula un aumento del 380 por ciento entre diciembre de 2023 y agosto. Esto significa que hace apenas 8 meses una familia tipo del conurbano bonaerense pagaba poco más de 30 mil pesos para cubrir los mismos 4 servicios que hoy le demandan más de 140 mil pesos.
Como contrapartida, los ingresos de esas mismas familias están aplastados. El índice de salario elaborado por el INDEC informó una suba del 84,3 por ciento en promedio de los sueldos entre diciembre y junio (último dato disponible). A su vez, el salario mínimo vital y móvil de agosto quedó en 262.432,93 pesos. Esto significa que la canasta básica de los servicios públicos es de más de la mitad (el 55%).
Los aumentos seguirán
A esta situación acuciante, hay que sumarle lo que pasará en los próximos meses. En rigor, ya está pasando porque en septiembre el gobierno nacional volvió a autorizar un aumento de tarifas en el boleto de colectivo y prepara otro para el sistema de trenes.
De hecho, el informe del observatorio ya advierte que “el gasto en transporte público será mayor en septiembre“. A esto le sumaron un segundo dato que hace pensar en futuros incrementos: “En los hogares del AMBA se pagan tarifas de servicios públicos que, en promedio, cubren el 44% de los costos, mientras que el Estado se hace cargo del 56% restante”.
Justamente, la idea del gobierno libertario es que los usuarios paguen prácticamente la totalidad de lo que cuestan los servicios públicos. De ahí que los técnicos de la UBA entiendan que en lo que resta del año seguirán subiendo los precios. Habrá que ver hasta dónde aguantan los bolsillos.
