Antonela Moreno, segunda candidata de Somos Buenos Aires por la Octava Sección Electoral y presidenta de la Juventud Radical bonaerense, participó del ciclo político Lado P de INFOCIELO Play. Con formación en Sociología y años de militancia, repasó su recorrido y planteó una lectura particular: la crisis del radicalismo también puede ser su oportunidad.
“Empecé en la Juventud Radical de mi pueblo y después me vine a estudiar a La Plata en 2013, donde seguí con una militancia más provincial”, recordó. Hoy integra el espacio para Adelante de Facundo Manes y Pablo Juliano, al tiempo que conduce a la JR de la provincia.
El radicalismo entre la desfiguración y el futuro
Moreno no esquiva la crítica al presente partidario: reconoce una “desfiguración, dibujo y desaparición electoral” que golpea al radicalismo. Sin embargo, lo interpreta como una chance para renovar estructuras. “Sobre todo quienes venimos de generaciones más jóvenes tenemos que volver a representar y apelar a otras mayorías”, señaló.
Su mirada se apoya en la irrupción de una camada que no quiere un partido meramente legislativo, sino con vocación de gobierno. “Hay una generación que se anima a generar otra oferta dentro del radicalismo”, afirmó, marcando un quiebre con la inercia de años anteriores.
La dirigente destacó que la Juventud Radical logró presentar más de cien candidatos en toda la provincia, varios encabezando listas de concejales. “A mí me toca como parte de la conducción de la JR hoy tener más de 100 candidatos jóvenes”, puntualizó.
En cuanto a la construcción de Somos Buenos Aires, subrayó que lejos de diluir al partido, lo potencia. “Tenemos que interpretar la época: hay una crisis de los partidos políticos en general. No es solo el radicalismo, es un fenómeno más amplio. Y en ese contexto, los valores del radicalismo son sumamente necesarios”.
“Vinieron a robar desde el primer día”: una exfuncionaria del PAMI denuncia corrupción en el gobierno de Milei
Una exfuncionaria del gobierno libertario contó cómo funcionan los entramados de corrupción en organismos públicos como el PAMI.
Con esa convicción, Moreno apuesta a transformar la “oportuncrisis” en un espacio fértil: “No queremos un partido que piense solo en esta elección. Queremos un radicalismo que se anime a gobernar y que se anime a transformar”.
