El empresario cárnico y candidato a diputado nacional por el Frente Patriota Federal, Alberto Samid, habló esta mañana en el programa Palabras más, palabras menos, por LA CIELO FM 103.5, y se refirió a la decisión de Daniel Scioli de sumarse al gobierno de Javier Milei como secretario de Turismo y Deportes de la Nación.
Samid contó que todavía se junta “de vez en cuando” con Scioli, aunque tratan de no “incursionar” en charlas políticas. “Él tomó un camino que yo no hubiera tomado, aunque lo comprendo, porque he visto cómo lo ha maltratado el kirchnerismo el último tiempo”, blanqueó.
“Primero lo maltrataban cuando era gobernador, para darle la plata para pagar los sueldos en el último día. Después al final le dijeron ‘vos tenés que ser presidente’. Macanudo”, relató.
“El kirchnerismo lo ha verdugueado mucho y bueno, él tomó esa decisión. Yo no la hubiera tomado, pero lo comprendo. Mire, un tipo cuando es muy forreado, vamos a hablar palabras como tienen que ser, llega un momento en que se cansa. Y el kirchnerismo lo recontra forreó sin ninguna duda a Daniel, a Alberto, a todos los candidatos”, remarcó Samid.
El dirigente matancero también explicó por qué decidió postularse como diputado nacional. Dijo que siente la obligación de “arrimar su granito de arena para solucionar los problemas de la gente”, en especial los relacionados con la alimentación. “Tengo tiempo, fuerza y sé cómo se hacen las cosas”, aseguró.
Durante la entrevista, Samid volvió a defender la industria nacional, cuestionó la importación de productos que compiten con la producción local y pidió eliminar la “industria del juicio laboral”, aunque advirtió que esa discusión “no puede implicar quitar derechos a los trabajadores”.
Para Ricardo Alfonsín, la suspensión de la Emergencia Pediátrica “genera un conflicto de poderes”
El exembajador argentino en España y candidato a diputado nacional por Proyecto Sur, Ricardo Alfonsín, cuestionó la decisión del Gobierno de Javier Milei de suspender la aplicación de la Ley de Emergencia Pediátrica, y aseguró que esa práctica vulnera el equilibrio entre los poderes del Estado.
