¡Somos campeones!: la voz de los conquistadores de América

En esas páginas, quien ya nadie podrá borrar, están los apellidos de Juan Sebastián Verón, Leandro Desábato, Agustín Alayes, Mariano Andújar y Gastón Fernández, entre otros tantos importantes. Todos ellos revivieron la Copa Libertadores 2009 en CIELOSPORTS.COM.

Si bien la imagen final es la de la Brujita levantando el trofeo en el Mineirao, él capitán y emblema del equipo por ese entonces, elige quedarse con varios momentos al expresar que “tengo un montón de imágenes y de momentos hoy en la cabeza. Lo que te queda es siempre la última imagen, el último instante. Pero el recorrido fue bastante duro y difícil. Pero dentro de ese camino tenemos muchas vivencias e historias”.

Juan Sebastián Verón sabe muy bien lo que es levantar la Copa Libertadores. Así lo mamó desde chico, viendo fotos de su padre (Juan Ramón) y lo recuerda con mucha alegría: “crecí y me formé acá. Pasé mucho tiempo dentro del club. Mis recuerdos de mi infancia son siempre relacionados con Estudiantes. Mi vieja tenía un cuaderno con recortes de mi papá, y siempre estaban las imágenes de los goles a Palmeira, Nacional y Manchester. Todas imágenes relacionadas al Estudiantes copero y crecí con eso”.

Otra familia muy arraigada a Estudiantes es la familia Alayes. Agustín, cumplió el sueño de ser jugador, aunque le costó insertarse en el equipo. Lo hizo y dejó el apellido grabado en la historia. “Al haber estado afuera y conocer la historia del club, entendiendo la magnitud del logro, siempre estuve al tanto de lo que habíamos conseguido. Vengo de una familia muy arraigada al club y la Copa Libertadores siempre fue muy importante”, destaca el Flaco a diez años del título más importante en su carrera.

“Es el logro más importante del club en los últimos 50 años. En mi caso es otro sueño cumplido pero a nivel institucional fue algo determinante para ese momento, para lo que vino después, y sin dudas para lo que vendrá mañana”, agregó el Flaco. 

Pero ese equipo contó con muchos protagonistas importantes. Uno de ellos fue Leandro Desábato, un jugador que llegó al club para enamorarse y gestar una relación de amor que trascendió su etapa como jugador.

El Chavo, sereno y reflexivo, analizó: “cuando llegan estas fechas recuerdo el grupo humano, los momentos que compartíamos, y los encuentros que teníamos con nuestras familias. Todo eso se me viene a la cabeza”.

Otro de los que llegó al club y dejó su apellido grabado a fuego fue Mariano Andújar. Aún dentro de la cancha, siente el amor y el cariño de los socios e hinchas, quienes le recuerdan los títulos logrados. “Hay un montón de situaciones y partidos que fueron difíciles pero lo primero que pienso es en la alegría de conseguir algo que es muy difícil y con el paso del tiempo va tomando valor”, destacó el arquero de aquel equipo Campeón de América.

Y agregó: “cuando pasan los años nos vamos dando cuenta lo difícil que es ganar y llegar a finales. Se ve en todos los equipos. Haber participado y ser protagonista de un logro para el club me da satisfacción”.

Por último, habló Gastón Fernández. La Gata, junto a Mauro Boselli, fueron los encargados de darle las dos alegrías al Pincha en aquella noche del Mineirao. Desde allí, su historia con el club cambió para siempre y a diez años aún lo siente especial.

“Han pasado diez años y la gente nos recuerda con mucho cariño. Siento mucha emoción por lo que significó para mi y la gente del club. Después de tantos años ganar un título tan importante, me llena de mucha alegría”, concluyó Gastón Fernández.