Como era de esperarse, el arribo de Carlos Tévez ha Rosario Central no iba a ser algo sencillo de digerir teniendo en cuenta que el Apache, es uno de los pesos pesados no sólo del deporte sino también de la política nacional y su arribo al Canalla será con la armada del empresario Christian Bragarnik quien no es mirado con buenos ojos por una importante cantidad de hinchas del equipo rosarino.
El anuncio que oficializó el arribo de Tévez a Central abrió también un discusión interna entre los socios. Entre ellos aparece el periodista y escritor Carlos Del Frade, diputado provincial del Frente Social que advirtió que la llegada del Carlitos y la llamada “Escudería Bragarnik” no es más que “ la desaparición de Central como club y su transformación en una plataforma de negocios y el avance del lavado de dinero ”.
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Las duras declaraciones del dirigente fueron brindadas a Télam en la antesala de lo que fue una asamblea en la Sede Fundacional de Central desde donde salió el recurso de amparo que busca “preservar el patrimonio del club ” pero que además “ se conozca el contrato de Tevez y Bragarnik ”, según explicó Jorge Kohen, reconocido profesional y socio de Central, presente en la asamblea.
El otro lado de la llegada de Tévez: los socios de Central desconfían de Bragarnik
“Los socios nos convocamos en asamblea porque no queremos que Central se transforme en una sociedad anónima, en una cita en la que también participó una parte de la comisión directiva y algunos ex síndicos como Germán Peralta y Carlos Del Frade. Estamos luchando contra el neoliberalismo, que invade hasta los sentimientos más íntimos del pueblo“, agregó Del Frade.
Este grupo de socios forma parte de la masa que la Memoria y Balance a la actual dirigencia que tiene como presidente a Rodolfo Di Pollina y que cree que el club podría ser utilizado para el regreso a escena de Daniel Angelici (ex presidente de Boca y dirigente del macrismo) y como plataforma de arribo para las sociedades anónimas deportivas (SAD) a la Argentina.
“Es un momento muy triste y un problema de primera línea con el saqueo de las divisiones inferiores y el quiebre de la identidad del club, popular por excelencia. Central es hijo de trabajadores ferroviarios y hoy se convirtió en una plataforma de negocios“, remarcon los socios que no se dejan encandilar por el brillo de las figuras que llegan al club.
