El pasado martes Estados Unidos derrotó a Inglaterra en la primera Semifinal del Mundial Femenino para sacar boleto a la gran Final, y lo hizo sin una de sus mejores jugadoras: sorpresivamente Megan Rapinoe no saltó a la cancha.
La experimentada delantera de 33 años quedó al margen de la formación titular minutos antes del inicio del partido, y luego no sumó minutos. Si bien se generaron suspicacias en torno a esta situación, todo se debió a una pequeña lesión.
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El volante trastabilló luego de que Saravia cayera detrás suyo. En el monitor pareció haber falta. El VAR no vio nada.
Tanto la propia Rapinoe como su entrenadora, Jill Ellis, confirmaron esto luego del encuentro en la zona mixta: una contractura en el tendón de la corva, que se encuentra en la zona de los isquiotibiales, la privó de jugar Semifinales.
¿Por qué se habló tanto sobre su ausencia? Rapinoe se destacó en esta Copa tanto adentro como afuera de la cancha, ya que además de convertir cinco goles fue noticia por sus declaraciones contra Donald Trump, presidente de EE.UU.
“ Estaré lista para la Final. Es duro tener solo tres días de descanso en este viejo cuerpo ”, explicó la jugadora, que por nada de del mundo se perderá el duelo ante Holanda: “Sentí que no iba a aguantar y creímos que esa era la mejor opción, para mí y para el equipo“.
