Los duelos entre Estudiantes y Vélez parecen haberse vuelto una habitualidad. Hace poco tiempo definieron la Copa de la Liga, hay grandes chances de que vuelvan a chocar en el Trofeo de Campeones de fin de año y sus equipos femeninos se medirán por el ascenso a la Primera División.
De cara a dicho encuentro, Carlos Bianchi, la figura más emblemática del club de Liniers y suegro del actual técnico de Estudiantes, Eduardo Domínguez, le dio una charla motivacional al equipo fortinero que el sábado jugará el primer partido como local. utilizó palabras muy claras y sentidas, más la dosis exacta de tranquilidad con la que el Virrey afrontaba los partidos definitorios.
no dejes de leer
¿Apellido amuleto?: la curiosa estadística de la última vez que un Barros Schelotto jugó el Clásico Platense
Nicolás Barros Schelotto fue probado en el equipo titular y su apellido carga con un buen antecedente cercano.
En River ya lo esperan: el detalle que falta para que Enzo Pérez vuelva al Millonario
“Lo único que tiene que hacer es no guardarse nada. En el fútbol se puede ganar o perder, pero lo que no tiene que hacer es quedarse con algo, así no tienen nada que reprocharse. Eso es lo más lindo”, dijo Bianchi ante el grupo de jugadoras que se enfrentarán con Estudiantes a dos partidos: el sábado a las 17 en la Villa Olímpica y una semana después en La Plata.
La charla de Carlos Bianchi a las chicas de Vélez
Carlos Bianchi antes de Vélez y Estudiantes
Eduardo Domínguez presente en la fiesta de Carlos Bianchi
Eduardo Domínguez disfruto del fin de semana libre de una manera muy familiar, en el impresionante cumpleaños de Carlos Bianchi.
Sí, el Virrey, suegro del Barba, cumplió 75 años el pasado 26 de abril, pero postergó su celebración para juntar el cumple con el de su mujer, Margarita, y lo hizo este sábado con un verdadero fiestón. Y por supuesto, el DT de Estudiantes, que está casado con la hija del ex DT multicampeón con Boca y Vélez, no faltó a la cita.
En la fiesta tocaron desde La Sole Pastorutti hasta el grupo Ráfaga, que le pusieron música y ritmo a una noche muy celebrada por la familia del entrenador del pincha, que en el último partido ante Central superó los 100 partidos dirigidos en Estudiantes.
