El mar de fondo entre el entrenador de la Selección Argentina y Estefanía Banini sumó un nuevo capítulo luego de que el técnico ofrezca una entrevista al programa Pibas con Pelotas de AM 750. Carlos Borrello, apuntado de ser quien decidió aportar a la talentosa atacante por diferencias personales, le paso la pelota a la jugadora del Levante :”Yo no me enojé, hubo un Panamericano en el que quería ver a otras jugadoras y ahí surgió el enojo de ella”, señalo quien dirigió a la albiceleste en tres mundiales (Estados Unidos 2003, China 2007 y Francia 2019).
Sin embargo los tiempos y las formas han cambiado sobremanera. El fútbol femenino ha crecido en adhesiones, en calidad y por eso ciertos mensajes no pasan desapercibidos. La frontalidad de jugadoras históricas como la propia Estefania Banini o Ruth Bravo, Belén Potassa y Florencia Bonsegundo les ha costado quedarse afuera de las convocatorias de un equipo que sin ellas no tendría el renombre de hoy.
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Tras la no convocatoria de este grupo a Lima las jugadoras pidieron “por un técnico que este a la altura” pero el pedido quedo en la nada. En su última aparición pública Borrello volvió a las formas que llaman la atención a extraños e irritan a propias: “Estefanía es una excelente jugadora y por eso la llevé al Mundial. Yo no estoy enojado con ella, pero tienen que entender que el entrenador está para algo”, aclaró el entrenador en un tono poco feliz para los tiempos que corren.
Ya en el programa Localía Femenina, Borrello había apuntado a Banini y Bonsegundo :”se enojaron porque no fueron citadas. Quizás esto no fue del todo profesional de su parte. Somos grandes ya, cada uno tiene que ser responsable de sus actos”, dejando en claro que, más allá de que se habló de lesiones (como lo hizo el responsable del fútbol femenino de AFA, Jorge Barrios) el técnico actuó por un asunto personal.
Lo cierto es que pese al crecimiento del fútbol femenino, los pedidos de las protagonistas siguen sin ser escuchados, algo que no sorprende ya que a la vista las riendas de AFA sigue siendo llevadas por hombres aún en espacios femeninos. Las dirigentes del fútbol local siguen sin tener voz ni voto real, la Selección sigue siendo dirigida por un hombre (cuando casi no existen casos en el mundo al revés) y la responsabilidad del fútbol femenino también está bajo la mirada de otro cuestionado: Jorge Barrios. Así es muy difícil que la AFA pregone la inclusión de la que habló Claudio Tapia en su asunción.
