La de anoche no fue una noche más para Exequiel Zeballos. El “Changuito”, el pibito de 19 años que es mimado de la gente de Boca y el que el propio Juan Román Riquelme prometió “cuidar mucho” tuvo – en la noche de La Plata- un ingreso a la altura de la expectativa que genera su desfachatez. El pibe que picó el penal en su primer gol en Primera, el que le hizo un gol al Barcelona por la Copa Maradona, anoche pateó su primer tiro libre con precisión de estrella y el marketing se metió en medio de un festejo que igual pudo salvar.
Inmediatamente después de hacer delirar a la enorme cantidad de público de Boca que copó ambas cabeceras de UNO, Zeballos fue a ponerse frente a su gente. Primero estiró los brazos en gesto de presentación y luego buscó el escudo para besarlo, pero, sencillamente no lo encontró. Inmediatamente el joven delantero recordó que este modelo de camiseta (un tributo a la que uso Diego Maradona en 1981) no tiene el escudo en la parte de adelante sino debajo de la nuca, por lo que giró y se estiro la número 30 para poner en alto la insignia xeneize.
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La particular escena ya había ocurrido en Turquía y la historia de Muhammed Gumuskaya, el joven atacante del Fenerbahce de Turquía recorrió el mundo. Al igual que Zeballos, el delantero del equipo turco también es una joven promesa y, al marcar su primer gol quiso besar el escudo de su equipo, pero no pudo encontrarlo por ninguna parte. A diferencia de Adidas que al menos dejó el emblema en la espalda, la marca Puma decidió innovar poniendo el nombre del equipo a la altura del pecho dejando el escudo directamente afuera de la camiseta para dejar, en forma piramidal, la marca primero, el nombre del equipo después y por debajo el sponsor principal.
Torneo de verano: Boca 2 Colo Colo 0
